Vaya, ya que habíamos abrazado cariñosamente a este nuevo James Bond, producto de la conversión que sufrió la franquicia ‘reinventando el personaje, y su presencia en nuestras vidas cinéfilas ha durado dos asaltos, el segundo de ellos con menos punch. Aunque ojo la palabra ‘retrasada’ no tiene el mismo significado que ‘cancelada’.
Ayer, los productores de 007, Michael G Wilson y Barbara Broccoli de EON Productions, no tuvieron más remedio que echar el cierre a la saga momentáneamente, y anunciaron que han decidido suspender indefinidamente el desarrollo de ‘Bond 23′, cuyo estreno estaba previsto para el 2011 ó 2012.
¿Los motivos?. Pues uno de ellos es el mismo que le está afectando en los últimos meses, y que también salpica a la nueva saga EDSLA: la continua incertidumbre que rodea el futuro de la MGM, que no hay alma bendita que se meta en el fregao de salvarla del agujero económico en el que está inmersa.
Y el otro es el fracaso en las negociaciones de su venta hasta el momento. Que por mucha reinvención del concepto de este superagente secreto, ningún Estudio se arriesga ahora a comprarla después de que se cerrara por fin esa historia de venganza que se llevaba entre manos 007.
La pregunta de ‘¿y ahora qué veremos del nuevo Bond?’ provoca miedo escénico.
La verdad es que hay que preocuparse por esta decisión de EON Productions. Esta gente, que junto a Danjaq LLC tiene el control de todo el merchandising de la franquicia en el mundo mundial, ha producido hasta la fecha 22 películas de 007 desde 1962, pasando seguramente momentos difíciles en su trayectoria, pero convirtiendo la saga a base de resistencia, en la más larga de la historia.
Así que el hecho de que hayan chapado la franquicia así, aunque dejen algún hilo de esperanza, es grave. Olvidaros por el momento de ver a Rachel Weisz de mala malísima.
- Vía | ComingSoon
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